La fábula del angelito

Huyendo despavorido de la escena de un crimen que no cometí, me senté y me puse a escribir. Es de esos caminos que no importa a dónde van, quizás voy a dejar que mis pasos... o mejor dicho, mis palabras, me lleven.

domingo, 30 de agosto de 2015

Eso que soy


Soy los sueños que no se van a cumplir
Y las metas incumplibles
Y las palabras que prefiero no decir;
Soy el día después del ayer
La nostalgia, la magia que nunca llegó,
Soy la marca de agua que no se borró,
La música calma que no se pudo escuchar;
Soy un viejo recuerdo que no quiero olvidar,
Soy el atardecer de un buen día,
O la última estrella que supo brillar;
Soy el caso perdido, la mentira perfecta,
La voz que no habla y quiere gritar,
Soy la risa apagada, la carcajada dormida,
Un salón vacío y sin salida,
Un sol oculto tras el mar;
Soy la página en blanco,
El pájaro que no sabe volar;
Soy la trama de algún cuento
Que entre lágrimas y risas
Va buscando su final.

Max Belaeff

30-08-2015

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